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Francisco Bernabé Madero

El viejo Madero apoyó la cabeza en sus rugosas manos fuertes, sobre el escritorio del general Roca. Aquel 21 de diciembre de 1885 se acababa de retirar del despacho presidencial ese personaje que era Estanislao Zeballos, que había acudido a recabar del vicepresidente a cargo del Poder Ejecutivo algunos datos para escribir un trabajo sobre la revolución de los Libres del Sur en el diario La Prensa. Su memoria le hizo dar un largo recorrido. La revolución del Sur ¡Aquellas galopeadas, aquellos fríos, pajonal y pajonal, cañadón, escarcha y horizonte! Desde julio del 39 anduve recorriendo Monsalvo y los Montes Grandes para arreglar que la gente estuviera lista el día de la rebelión. Leguas y leguas a uña de caballo, con esos vientos que cortan la cara y vigorizan el espíritu, entre los espartillares y juncales del Tuyú, con el agua dando en las caronas, las patas encogidas para no mojarse. Lavalle le había escrito a Pedro Castelli, su antiguo compañero de armas, para que encabezara el alza

Biografía del Gral José María Bustillo

Nació en Buenos Aires el 18 de Octubre de 1816, é ingresó al ejército en el año 1840.

El 3 de Abril del año 1840 emigró al Estado Oriental, junto con el Señor General Don José Mª Paz y algunos otros. Llegado a la Banda Oriental se dirigió a Montevideo dejando al General Paz en la Colonia, y sé presentó inmediatamente a la comisión argentina para formar parte de una expedición, que en esos momentos se organizaba con destino al ejército libertador que, a las órdenes del General Lavalle se encontraba a sazón en la Provincia de Entre Ríos.

En los primeros días del mes de Mayo de 1840, salió la expedición en tres buques a cargo de Don José Lavalle, hermano del General, y llegaron a Punta Gorda el 8 de Junio del mismo año. Después de la batalla del «Sauce Grande» el 16 de julio de 1840, y cuando el General Lavalle pasó el Paraná, resolvió seguir al General Paz que en esos momentos se encontraba también en el Diamante «P. Gorda» y se dirigía a Corrientes a formar un nuevo ejército.

Admitido a su servicio a su llegada a Corrientes, fue reconocido el 15 de Agosto de 1840, como Subteniente de unos de los Batallones de Infantería que debía formar parte del Ejército, y que se denominó «Cazadores de la Libertad» a las órdenes primero del Coronel Don Juan P. Olleros, y después del Coronel D. Felipe López.

Durante la Campaña y Batalla de «Caá Guazú» fue ascendido a Teniente 2º el 4 de diciembre de 1840; a Teniente 1º el 9 de marzo de 1841; a Ayudante Mayor el 18 de Julio de 1841. En esta última clase asistió a la Batalla de «Caá Guazú» el 28 de Noviembre de 1841, formando parte del mencionado Batallón que tuvo un rol principal en la acción, como consta de los partes oficiales y de las memorias del General Paz.

En esa Batalla recibió una leve herida en la pierna izquierda por una bala de cañón que le mató el caballo. Ascendió a Capitán después de la Batalla; formó parte como Comandante de la Compañía de Granaderos del mencionado Batallón de la columna que a las órdenes inmediatas del General Don Juan Apóstol Martínez, desprendió el General en jefe para tomar el Paraná «Bajada».

Tomada la ciudad del Paraná, y luego que el resto del Ejército llegó a sus inmediaciones, resolvió el Gobernador de Corrientes que se encontraba allí, retirar todas las fuerzas de su Provincia, dejando al General Paz solo aquellas fuerzas que no le pertenecían, compuestas en su mayor parte, sino en el todo, de los prisioneros tomados en «Caá Guazú».

Con éstas, fueron en marcha, abandonando la ciudad, hasta que llegados a Nogoyá se sublevaron en una noche del mes de Marzo de 1842.

Producida la sublevación, el General Paz se retiró del campo, acompañado de los Jefes y Oficiales que componían su Estado Mayor, dejando ordenado al entonces Sargento Mayor Don Mariano Echenagucia, buscara su incorporación con dos Compañías de Infantería que era todo lo que aún permanecía fiel, y de las cuales el Capitán Bustillo mandaba la primera y el Capitán Mathon la segunda.

Efectuada la incorporación en San Antonio Petesco, después de tres días de fatigas y penosas marchas, constantemente hostilizados por los mismos sublevados, emprendieron la marcha hacia la Concepción del Uruguay, donde llegaron y trataron inmediatamente de organizar alguna fuerza más resistente; trascurrido un poco de tiempo fue comisionado para trasladarse a Gualeguaychú, donde se encontraba el entonces Teniente Coronel Hornos, para levantar un sumario a varios presos tomados por él.

Mientras se encontraba desempeñando esta comisión, fueron sorprendidos por fuerzas del General Oribe, que ya invadía á Entre Ríos; y después de una reñida resistencia emprendieron la retirada, buscando la incorporación del General y sus fuerzas.

Realizada esta y llegados frente a Paysandú, río por medio, se le ordenó situarse con su Compañía en el Paso para proteger el pasaje, efectuándolo el General y su Estado Mayor.

El resto de la fuerza no sabemos que órdenes recibirían; el hecho es que desde aquel momento el Capitán José M. Bustillo hoy General de División, quedó solo con su compañía en aquel punto, donde a los cuatro días fue atacado por una fuerza de Caballería muy superior en número, con lo que sostuvo un fuerte y prolongado tiroteo, siendo por fin rechazada.

Habiéndole llegado embarcaciones y orden de pasar el río, la efectuó con la compañía, campando en el Saladero Sacra, donde permaneció un poco de tiempo hasta que llamado por el General Paz, le ordenó eligiese doce hombres de los de más confianza para escoltarlo hasta Montevideo, donde se retiraba.

Así lo hizo, y llegado a esa ciudad, fueron todos licenciados.

Encontrándose en la ciudad de Montevideo sobrevino el sitio, y el General Oribe vencedor de Ribera en el Arroyo Grande, había invadido el territorio Oriental. Solicitado con instancia el General Paz, para que se hiciera cargo de la defensa, aceptó la tarea de prepararla y organizarla.

Entonces algunos de los Oficiales que habían servido a sus órdenes y lo habían acompañado a las campañas de Entre Ríos y Corrientes, tomaron igualmente servicio en las filas de la defensa.

Reconocido en clase de Capitán el (7 de Enero 1843) fue destinado a mandar la Compañía de Granaderos del Batallón 4º de Infantería de línea, cuya formación y mando estaba confiada al entonces Coronel César Diaz. El 3 de Enero de 1844 fue ascendido a Sargento Mayor efectivo del mismo batallón, y en 28 de Agosto de 1845 fue ascendido a Teniente Coronel Graduado 2º Jefe del mismo. En esta clase continuó prestando sus servicios en el expresado en algunas ocasiones con el mando exclusivo de él, hasta Abril de 1846 en que su batallón se sublevó encabezado por los Sargentos.

En los años transcurridos hasta esta fecha, que fueron los más penosos del sitio, y durante los cuales se combatía diariamente, se ha encontrado con el Batallón que era considerado como uno de los más sólidos que la Plaza tenía en el arma de Infantería, en todas las acciones y operaciones de guerra que tuvieron lugar.

De estas, las más importantes por revestir un carácter general, fueron:

Combate del «Cristo» el 10 de Marzo de 1843.

Combate del 21 de Marzo sobre el mismo terreno.

Salida general y combate del 5 de Julio, a las órdenes inmediatas del General Paz.

Salida general y combate del 2 de Junio, al mando inmediato del mismo.

Batalla del 13 de Setiembre 1843.

Salida y ataque del Buceo el 31 de Octubre de 1843.

Salida y ataque del 15 de Febrero de 1844. En ese día tuvo el mando inmediato del Batallón y el Coronel Diaz mandaba la Brigada que formaban con el 5º de Línea.

Batalla del Cerro el 28 de Marzo de 1844.

Batalla sobre el paso del Pantanoso. —Ese día tuvo el mando inmediato del Batallón. El Coronel Diaz mandaba una Brigada de cuatro batallones.

Combate del 5 de Diciembre de 1844, sobre el terreno de la Cordobesa.

Salida y ataque del 14 de Abril de 1845.

Además de estas acciones se producían casi diariamente combates parciales y guerrillas más o menos sostenidas, en que el Batallón casi siempre tomaba parte y en las que por consiguiente se encontraba.

Caras y Caretas (Buenos Aires). 30/10/1909, n.º 578, página 55. a los 93 años.


Producido el movimiento de Corrientes en Abril de 1846 dejó el servicio en Montevideo, como lo hicieron la mayor parte de los argentinos, y formó parte de la expedición que salió de aquella plaza para ir a buscar nuevamente la incorporación del General Paz, que trataba de organizar en Corrientes un nuevo Ejército Libertador.

Los esfuerzos del General fracasaron y regresó a Montevideo, donde permaneció hasta que la situación de la República le permitió volver a Buenos Aires.

Sublevado el pueblo de Buenos Aires con los procederes del General Urquiza, el 11 de Setiembre de 1852 y sitio de Buenos Aires en 1853 se adhirió al movimiento, formando como soldado en las filas de la revolución.

Reconocido poco después en su grado de Teniente Coronel de Infantería de Línea, se le confió el mando del 2º batallón de Guardia Nacional, que tuvo por ese tiempo su formación.

El 24 de Febrero de 1853 se le extendieron los despachos de Teniente Coronel efectivo de Infantería de Línea, y el 14 de Marzo del mismo año el grado de Coronel de Ejército.

Establecido por Lagos el sitio de esta plaza, cubrió con su batallón la parte comprendida entre el río y la Convalecencia; este batallón y algunas otras fuerzas formaban la extrema izquierda de la línea, cuyo mando superior se le confió.

Durante el sitio se encontró en las operaciones que tuvieron lugar por ese costado.

De ellas, como de una importancia relativa recordamos:

1º Toma y defensa de la quinta de Horne por el Batállón 2º a sus órdenes, 24 de Mayo de 1853.

2º Dos ataques al Puente de Barracas bajo las inmediatas órdenes del General Pacheco.

Además algunas escaramuzas y guerrillas más o menos sostenidas.

Después del sitio de 1853 continuó mandando el Regimiento 2º de G. N. y en los sucesos que siguieron a Cepeda cubrió con el Regimiento la misma parte de la línea de defensa que tuvo a su cargo en 1853, con el mismo comando superior.

En la campaña que se abrió contra el Gobierno de la Confederación y que dio por resultado la victoria de Pavón, se le confió el mando de una división, de las tres armas, denominada «Segunda División del 5º Cuerpo de Ejército» compuesta de una Legión de voluntarios Italianos, tres compañías de Infantería de G. N., una batería de Artillería y dos Regimientos de Caballería de G. N., la cual extendió sus acciones al Oeste y Norte de la Provincia en Setiembre 9 de 1861.

Una vez llegado a San Nicolás, y cuando regresaron a Buenos Aires la mayor parte de las fuerzas que componían el Ejército, pasó por orden superior al Rosario, donde tomó el mando del Batallón 5º de Infantería de Línea el 15 de Diciembre de 1861.

Hechose cargo del expresado y en virtud de órdenes recibidas, marchó con él a la frontera, estacionándose con él en Riojas.

Algún tiempo después de estar allí, recibió orden de bajar a Buenos Aires, dejando el Batallón en aquel punto, y una vez en esta Ciudad, el General Mitre, encargado del P. E. N. le hizo saber que el Gobierno de Buenos Aires, a solicitud de los oficiales del 2º Regimiento de G. N. le había pedido para mandarlo: y dejando a su elección el tomar o no el mando, lo aceptó, teniendo también en consideración que ningún Batallón de línea más que el suyo estaba mandado por un oficial de su graduación, y sobre todo que no era posible ponerlo en un mejor pie de organización, porque las necesidades del servicio de frontera lo mantenían desparramado continuamente en diversos puntos de la línea.

Dejó pues el mando del 5º de línea y tomó el del 2º Regimiento de G. N. en Abril de 1862.

El 19 de Abril de 1863 fue nombrado Comandante en Jefe de la división de Infantería, con que la Capital concurría a la guerra del Paraguay.

El 23 de Abril de 1865 se le acordó la efectividad de Coronel.

Al mando de esa división que se denominó «1ª División Buenos Aires», hizo la referida campaña desde el 26 de Junio de 1865, hasta Agosto de 1868, en que tuvo que dejar el ejército por razones que son de notoriedad.

Durante la campaña del Paraguay, se ha encontrado en las siguientes acciones y operaciones de guerra.

Movimiento del 2 de Marzo de 1866.

Paso de la Patria en Abril de 1866.

Batalla de Tuyutí, Mayo 24 de 1866.

Movimiento por la derecha en la tarde del día 18 de Julio de 1866.

Asalto de Curupaity Setiembre 22 de 1866.

Paso del Estero Bellaco, Mayo 1867.

El Exmo Gobierno Nacional, le acordó el uso de una medalla de oro por la referida campaña, otra el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires como Jefe de una de sus divisiones de Infantería y la que el Gobierno Brasilero acordó al ejército aliado.

El Gobierno Nacional le acordó también el uso de los cordones de oro por la batalla de Tuyutí el 24 de Mayo, 1866 y un escudo de oro por el ataque de Curupaity, 22 de Setiembre 1866.

De regreso de la campaña del Paraguay a esta Capital, fue nombrado por el Presidente Sarmiento, Capitán General de Puertos, en Octubre de 1868, cuyo puesto desempeñó en toda su administración, siendo también en ese carácter Presidente de la Junta de Sanidad. Pocos días antes de terminar ese periodo gubernativo, y con motivo de los sucesos políticos y militares de Setiembre de 1874; fue nombrado Comandante militar de Martin García y Jefe Superior de las fuerzas que la guarnecían, consistentes en el Batallón 8 de línea, 4º de G. N., Batallón de artillería de plaza y dos piquetes de destinados.

Retuvo el mando de la Islas hasta dos meses después de terminados aquellos sucesos en que lo dejó por renuncia, siendo incorporado a la Plana Mayor activa.

El 30 de Setiembre de 1879 el Presidente Avellaneda, previo acuerdo del H. Senado, lo elevó al rango de General de Brigada.

Estallada la revolución de 1880, en ese año, cuando la rebelión del Gobernador de Buenos Aires forzó al Gobierno Nacional a dejar su residencia en esta ciudad, se dirigió á Belgrano en cumplimiento de los decretos gubernativos: y allí, una vez rotas las hostilidades, se le nombró Comisionado Nacional en la Campaña de Buenos Aires, hasta que por la caída sucesiva del Gobernador Tejedor y del Vice Dr. Moreno, se le nombró Interventor Nacional en la Provincia, cuyo Gobierno inmediatamente asumió, hasta que nuevamente organizado su Poder Legislativo, entregó el Gobierno al Presidente del Senado, Dr. Don Juan J. Romero, el 11 de Octubre de 1880.

Además de los servicios que dejamos detallados, debemos recordar los que a continuación expresamos.

Diputado a la Legislatura del Estado de Buenos Aires, desde la instalación de ella en 1852 hasta el año 1865 en que marchó al Paraguay.

Presidente de la Comisión encargada de hacer la distribución de los premios acordados a los que formaron parte del ejército del Paraguay.

En varias ocasiones Presidente y vocal de Consejos de Guerra. Fue también Comisario extraordinario en las agitadas elecciones de Marzo 1864 en que por primera vez se nombraron, con ese título, Jefes militares de alta graduación para guardar el orden en las Parroquias por medio de tropa de línea a sus órdenes.

Fue miembro de la Comisión de oficiales generales que se trasportó a Montevideo para acompañar hasta esta los restos del Ilustre General Don José de San Martín.

Desempeñó el puesto de Presidente de la Comisión encargada de la formación de fojas de servicio.

Miembro de la Comisión de Jefes de Infantería, encargada de arreglar el Reglamento de ejercicios y maniobras de Infantería de España en el año 1854.

Presidente de la Comisión que se nombró en el año 1877, para intervenir en el Recuento de las existencias de la Comisaría de Guerra y Parque de Artillería.

En las elecciones de 1869 y 1877, en la Ciudad de Mercedes, Comisario extraordinario para conservar el orden.

Jefe interino del Estado Mayor del ejército.

Inspector de Infantería.

Diputado al Congreso Nacional por la Capital en el período de 1885 a 1890, y por último Vocal de la Junta Superior de Guerra.

Fuente: Biografías Militares. Editado por Eneas Zambra. Buenos Aires, 1894

Notas de Francisco Cayol: 

En Montevideo conoció a su mujer Emilia Díaz, hermana de su superior el Gral César Díaz.

Fue también fundador y quinto presidente del Club del Progreso, donde se buscó la integración de unitarios y federales y favorecer al progreso de la Argentina.

Vivió 93 años y falleció a causa de un resfrío que se agarró el 25 de Mayo de 1910 por descubrirse para saludar a la Infanta Isabel durante los festejos del bicentenario.



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